Mónica (nombre ficticio) es una adolescente que intentó llegar a Estados Unidos. Sin embargo, mientras transitaba por México, tuvo un accidente que la obligó a permanecer por casi dos semanas sola en un hospital.
“Ella viajaba en un furgón por Chiapas, pero se accidentaron. Tuvo un problema en la mandíbula y estuvo 12 días hospitalizada”, indicó la licenciada María Guzmán, profesional en psicología de la Delegación de la Procuraduría General de la Nación -PGN- en Malacatán, San Marcos.
Añadió que Mónica no recuerda el hecho, sólo narró que el furgón iba en una vuelta y cuando ella despertó ya estaba en el hospital. Afortunadamente, pudo regresar en un grupo de niñas, niños y adolescentes migrantes no acompañados, que ingresó por la frontera de Tecún Umán, San Marcos.
En este sentido, las Delegaciones Regionales de la Procuraduría General de la Nación ubicadas en Malacatán y Quetzaltenango, han brindado apoyo y acompañamiento a 274 Niñas, Niños y Adolescentes -NNA- retornados no acompañados, quienes han ingresado vía terrestre, del 1 de enero al 19 de febrero de 2024.
Del total, 196 son de género masculino y 78 de género femenino. Las edades más recurrentes son de 14 a 17 años, aunque “han ingresado de 6 o 5 años y han venido acompañadas por primas o hermanas”, indicó la licenciada Guzmán.
Alta Verapaz, San Marcos, Quiché, Huehuetenango y Sololá, son los departamentos que presentan mayor número de casos.
Ruta de atención
Cuando los NNA ingresan vía terrestre por la frontera de Tecún Umán, son recibidos en el Centro de Retornados. El personal de PGN se encarga de verificar que no se les hayan vulnerado sus derechos. Asimismo, corrobora el lugar de dónde vienen y de dónde son originarios.
En conjunto con otras instituciones gubernamentales y no gubernamentales, PGN les brinda acompañamiento y se les provee alimentos; posteriormente, el personal del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social les realiza una entrevista para verificar su condición de salud.
Si alguno de las niñas, niños y adolescentes tiene Alerta ALBA-KENETH activa o si ha sufrido algún trauma en el camino, como el caso de Mónica, se les brinda soporte psicológico adicional.
Por último, son llevados a Casa Nuestras Raíces ubicada en Quetzaltenango, en donde, el personal de la Delegación de PGN, realiza las coordinaciones necesarias para reintegrarlos a su núcleo familiar.